Una sonrisa perfecta debe ir acompañada de una rutina de cuidado e higiene bucal diaria, además de las visitas periódicas al dentista. Cuando no hacemos un correcto chequeo dental de manera adecuada y frecuente, surgen las enfermedades bucales, encías sangrantes, cálculo, caries.

Los cepillos dentales, sean manuales o eléctricos, son el instrumento utilizado para lograr el aseo y cuidado bucal habitualmente. No obstante, no es posible obtener resultados parecidos a los de un especialista y un odontólogo desde casa. Es por ello que es recomendable recurrir a un irrigador dental. El propósito principal de la irrigación oral es reducir las bacterias nocivas y el riesgo y la severidad de la enfermedad periodontal.

Un irrigador dental es un dispositivo con un depósito que ayuda a limpiar tu boca. Se utiliza, esencialmente, cuando se ha terminado de cepillar los dientes. El irrigador es un dispositivo que no necesita, según sus características y composición, de mucho espacio, además de que no requiere gastos de mantenimiento y no tiene contraindicaciones.

Fácil de usar, simplemente cepilla tus dientes del modo usual, llenas el deposito del irrigador con agua en la temperatura que gustes (puede ser fría o tibia) y, asimismo, le agregas el enjuague bucal.

irrigador dental ventajasIndicaremos algunas de las características que mejor demarcan a este producto como un dispositivo eficiente y seguro para los detalles más minuciosos de la higiene dental:

  1. Es de fácil uso y aplicación: Usarlo no tiene mayores complicaciones. Coloca la boquilla y la introduces en la boca. Actívalo y apunta la corriente de agua hacia las encías, los bordes y entre los dientes. La inclinación recomendada es un ángulo de 90°, teniendo como referencia las encías. Recorre con el irrigador toda la boca con lentitud y atención, para que el irrigador haga su función. Se recomienda comenzar a limpiar por un costado de los dientes superiores y las encías, para luego continuar hasta el final del costado opuesto.
  2. Atiende zonas de difícil acceso en la parte inferior de la boca: conviene repetir el proceso con los dientes inferiores. Enfocándote específicamente en la zona central de los dientes para maximizar el efecto de limpieza y expulsar los restos en aquellos lugares de difícil acceso. Una vez atendida bien todas las zonas interdentales, los lugares difíciles de alcanzar y, asimismo, las encías, puedes parar. Intenta dejar el depósito dental totalmente vacío. Sucesivamente, hay que limpiar bien el aparato, para que siga siendo igual de efectivo
  3. Lo acompaña una gran variedad de modelos: existen multitud de modelos, atendiendo a las necesidades del interesado. Portátiles o de sobremesa, con micro burbujas, con control de presión de agua, con varias boquillas. Incorporan depósitos de agua de diferentes tamaños, con temporizador y diferentes niveles de presión. Puede ir desde las más baja/suave hasta la más fuerte, recomendada para la limpieza de trabajos de ortodoncia.
  4. Modos de operación diferentes: dependiendo del modelo del irrigador dental existen las opciones para el cambio del chorro, puede ser mono chorro, el cual produce una conducción de líquido directo o chorro giratorio. Los precios variaran atendiendo a sus características.
  5. Todos tienen opción de flujo pulsado: el más común es el de flujo pulsado y el más recomendado. Además de este, también hay otros modelos básicos como el irrigador de flujo directo o corriente constante. La diferencia entre estos dos tipos es que el de flujo pulsado –como lo indica su nombre- funciona al pulsar un botón, mientras que el de flujo directo o constante funciona de forma directa al encenderse. Es preferible la acción de pulsar porque el usuario controla el flujo de agua.
  6. Otras opciones de irrigación: otro tipo de irrigador es el de tipo magnetizado, el cual implementa agua cargada, lo cual hace que la formación de cálculos se reduzca considerablemente, más que con un dispositivo de funcionamiento básico.
  7. Prevé las caries: El irrigador dental ayuda a prevenir caries. También ataca el mal aliento (halitosis), las inflamaciones dentales, las bacterias en dientes y encías. Complementa la acción del cepillo y el hilo dental. Fue inventado como una alternativa a la seda dental.
  8. Previene muchas enfermedades bucales: Es una herramienta efectiva en la reducción de la placa dental, pues minimiza la presencia del sarro que produce la piedra y cálculo. Previene la gingivitis y la periodontitis (sangrado frecuente de las encías).
  9. Beneficios de aspectos variados: son casi innumerables las ventajas que devienen de su uso en cuanto a salud. Entre ellas se destacan el utilizar el irrigador dental personas de todas las edades. Será un instrumento fundamental para que los más pequeños de la casa comiencen a cuidar su salud dental. También es ideal para quienes desean conseguir una mayor sensación de limpieza y frescor en la boca.
  10. Reduce los riesgos por dolor e incomodidad: mejora significativamente la salud bucal en situaciones clínicas especiales como diabetes. Es indoloro, aplicable ante cualquier paciente. Su uso no produce dolor alguno, a diferencia de otras herramientas de uso dental, que pueden llegar a dañar encías y provocar sangrados.

irrigador dental 10 ventajasLos estudios han demostrado que, usando un irrigador dental junto con el cepillado diario, dos veces al día, puede quitar un 99% más de placa que solamente al utilizar un cepillo de dientes.

El uso de un irrigador bucal mejora la salud de las encías hasta un 93% en comparación con el cepillado solo. También ayuda a reducir significativamente la gingivitis después de usarlo 2 semanas. El agua a presión durante 3 segundos elimina el 99,9% de la placa en las zonas tratadas.

Puede eliminar todo tipo de manchas de la superficie de los dientes. Recupera su tono de color natural, lo que permitirá lucir una sonrisa más bonita y mejor imagen. Coadyuva de manera eficaz en el mantenimiento de los puentes, coronas, implantes. Del mismo modo sirve para tratamientos de ortodoncia, brackets alambres, bandas y frenos.

El irrigador dental es una inversión en salud y bienestar. No obstante, aunque se demuestren sus ventajas y beneficios, el irrigador no es sustituto del cepillado diario. Es un complemento perfecto para mejorar la salud e higiene bucal. Se recomienda consultar al dentista. Sin embargo, es un instrumento único.